5 consejos para llevar una vida saludable
Nuestra forma de vida afecta de forma directa a nuestro cuerpo y a nuestra salud. Llevar unos hábitos de vida saludables afecta no sólo a la salud física de nuestro organismo, sino también a nuestra salud mental. Cuando nos encontramos físicamente bien, estamos mejor anímicamente, nos sentimos más activos y en equilibrio con nuestro cuerpo.
Os damos cinco consejos que ayudarán a llevar una vida saludable.
- Lleva una alimentación sana y equilibrada.
Una alimentación saludable es aquella que nos proporciona todos los nutrientes que necesita nuestro organismo en las cantidades y proporciones correctas. Nuestro organismo necesita hidratos de carbono, proteínas, lípidos, minerales y vitaminas. Una dieta saludable debe basarse en el consumo de verduras, hortalizas y fruta, que aportan fibra, minerales, vitaminas y agua; alimentos que nos aporten proteína (carnes, pescados, lácteos, legumbres,…); el aporte de hidratos de carbono nos lo dan los cereales (integrales), legumbres y frutas; además nuestro consumo de grasas debe estar basado en el consumo de ácidos grasos cardiosaludables, como los presentes en el aceite de oliva extra virgen (ácido oleico), pescado azul (omega 3) y los frutos secos.
- Mantén tu cuerpo hidratado: bebe agua.
La hidratación y el agua es fundamental para el correcto funcionamiento de nuestras células y de todo nuestro organismo. Una mala hidratación afecta de forma directa a nuestra piel y mucosas, a la digestión, y también puede ser causa de lesiones musculares. El agua la aportamos a nuestro organismo principalmente bebiendo agua y mediante el consumo de frutas y verduras. Las bebidas con gas, y especialmente, las azucaradas no son nada buenas para nuestra salud.
- Realizar actividad física.
La actividad física es fundamental para mantener nuestro cuerpo sano. Nuestra forma de vida actual y nuestra actividad diaria no permite que ejercitemos nuestro cuerpo de la forma que necesita. Las contracturas, dolores de espalda y cervicales, sobrecargas musculares… todas estas lesiones son consecuencia de no tener una musculatura correctamente tonificada y de la adquisición de posturas incorrectas que podemos resolver mediante entrenamientos personalizados. Esto sin contar con el acuciante problema de sobrepeso y la necesidad de bajar de peso para conservar nuestra salud. Aunque en principio se puede pensar que cualquier actividad física es válida, esto no es siempre así. Os recomendamos poneros en manos de profesionales, ya sea en actividades grupales como en entrenamientos personales, especialmente si tenéis alguna lesión.
- Evitar el estrés o aprender a manejarlo.
El ajetreo diario hace que suframos un estrés continuo. Ese estado de alerta y premura constante no es nada aconsejable para nuestra salud, tanto física como mental. Es evidente que muchas de nuestras obligaciones diarias son ineludibles pero, en algunos casos, quizá no estemos priorizando lo más importante, que es nuestra salud. Cuando tenemos muchas tareas diarias debemos de tener claro qué cosas son las importantes y entre las primeras debe estar en cuidar de nuestra salud y de nuestro cuerpo para que todo lo demás funcione y podamos realizar nuestras obligaciones. “No tengo tiempo de cuidar la alimentación”, “no tengo tiempo de hacer ejercicio” o de “ir al gimnasio” son frases que nos resultan muy familiares. Piensa que si te encuentras bien físicamente y te alimentas de forma correcta “tu cabeza” funcionará mejor y bajará tu nivel de estrés.
- Escucha tu cuerpo y ayúdalo cuando lo necesite.
Si te quejas constantemente de problemas digestivos (digestiones pesadas, estreñimiento, reflujos, etc.), tienes sobrepeso, sufres de continuo dolores musculares o articulares, o te lesionas con frecuencia, tu cuerpo te está diciendo que tienes que cambiar algo: tu alimentación, tu actividad física, tu actitud… Identificar qué necesitamos cambiar y acudir a profesionales especialistas para que te ayuden a mejorar la situación y reeducarte en hábitos de vida saludable, ya sean en el plano nutricional como en el de tu actividad física es clave para mejorar tu calidad de vida.